domingo, agosto 23, 2009

A LA RUTINA

Estamos terminando el verano y comenzamos nuevamente la rutina de cada día. La que nos salva, y hasta nos descansa, porque fuera de lo que somos capaces de controlar, no acabamos de sentirnos a gusto. Lo comprobamos día a día cuando fuera de nuestro ámbito, pensamos en el sofá de nuestro comedor, como el comienzo del paraíso. Hasta qué punto esto será así, que a pesar de todo, un huevo frito en casa sabe mejor que todos los platos de los restaurantes que hemos visitado.

La solución del cansancio de los días, que pretendemos en lo que llamamos vacaciones, al final es solo volver a él. En definitiva “en casa el culo descansa”.

Esa mismo situación que ocurre en lo físico, ocurre también a niveles de pensamiento e incluso de situaciones personales. A pesar de todo, solo conseguimos dominar aquello que tenemos como seguro, nuestra casa, nuestra familia, nuestros amigos, nuestros vecinos, nuestros pueblos …
Es lo malo, lo contradictorio de todos nosotros. Anhelamos lo que no tenemos y cuando somos capaces de estar en ello, queremos volver a lo de siempre, porque lo consideramos seguro, prudente, incluso … feliz.

No sé si las empresas de vacaciones tienen claro esta doble contradicción. Pero seguro que entre otras de sus ocupaciones, está la de considerar que tras unos días, semanas, incluso, en algunos, meses, lo diario, lo normal, lo monótono siempre, tarde o temprano es lo deseado. Y un gazpacho, por ejemplo, es apetecible siempre para un sureño. Un poco de sombra y frescor siempre lo considerará paradisíaco un norteño … Por eso, tiempo libre es necesario solo el justo para no cansarse y poder volver nuevamente a retomar lo que consideramos seguro.

En definitiva, para nosotros el invierno es seguridad, el trabajo, es seguridad, la monotonía es seguridad, nuestro hogar es seguridad, a los que vemos a diario, es seguridad. Hacer un alto está bien, para conseguir algo de aventura, pero volvemos como esos animales que tienen que regresar a donde nacieron, a la seguridad, a la confianza, a lo de todos los días.

A los que no nos ha dado tiempo de saborear esa pequeña aventura, nos va a quedar en este septiembre un pequeño lapsus antes de regresar. Nos va a quedar un poco de tiempo aún (volátil y corto, pero tiempo al fin). Pero aseguro que van a ser días incómodos, pesados y en algún momento dolorosos … Es lo que tiene salir de la cueva, aunque sea con poco tiempo por delante.

O sea, se acabaron las vacaciones, gracias a Dios.

Alguno, tras acertar con un sitio o una situación, va a intentar en los próximos días, buscar como volver a repetir el éxito de estos días. Yo que tú no lo intentaba … el tiempo pasado ha muerto, lo que está por delante, aunque pueda resultar aburrido y monótono, es tiempo de seguridad y la realidad única que tenemos, que poseemos y en la que no nos encontramos incómodos.
Aprovechémosla.

Algún otro tras el fracaso de una planificación hará otra intentando no equivocarse en la siguiente, sin darse cuenta que volverá a ser más o menos lo mismo. De pocos errores de estos aprendemos.

Ya sé que alguno no ha podido … A este paso cada vez serán menos. Lo siento.

Como siento que haya muerto en estos días anteriores de Agosto mi fiel perro y compañero Froilán de Todos los Chuchos. Sit tibi terra levis, hermano.